domingo, 13 de abril de 2008

El encuentro con Bartolomé

Casa de la Cultura de Adrogué. 18 de marzo del 2007. Grabación del cd "Cantando Vivo" con Palermo Trío


A mi segundo ex compañero debo agradecer el buen ojo para focalizar que Bartolomé Palermo era el maestro que mi alma necesitaba conocer.
El 2004 trajo el nacimiento de mi adorada sobrina Valentina, la primera visita de mi vieja a España y los preparativos para reencontrame con Viva Ruíz y tanguear nuevamente por Ecuador.
El proyecto La Nova Golfa parpadeaba sus últimas luces. Mi socia Kika deseaba descansar en su selva peruana y yo como siempre volar en busca de nuevas sensaciones.
Mi espíritu estaba felízmente alterado, así que desaparecí de Barcelona por más de tres meses.
Guyaquil, Montañita, Ayampe, Quito. Descanso y trabajo, y por fin el sueño pendiente: las Islas Galápagos.
Durante la travesía volví a contar con el apoyo guitarrero de mi amigo Claudio Durán para los shows que fueron fluyendo como cascadas.
El Concierto del 29 de mayo en el Swissotel de Quito será inolvidable para mi psique. La euforia musical propició un festín con el diablo en forma de sustancia blanca, después de varios años de ausencia y casi me voy quién sabe donde. Me asusté lo suficiente como para prometer a mi santo no volver a provocar un encuentro similar. Soy mujer de voluntades firmes y lo he cumplido.
A las Islas Galapágos fuí con una marchant llamada Nina y su hijo, pero esa es otra historia bizarra que hoy no viene al caso.
El paraíso me recompuso tanto que decidí volver al terruño para abrazar a los viejos y grabar un nuevo disco. También mi amada Kika se sumó al disfrute y llegó a Buenos Aires antes que yo.
Como soy (aunque no quiera) una artista ultra-independiente siempre he gestionado mis asuntos a puro pulmón. Así se sucedieron los cuatro pequeños discos que forman parte de mi testimonio tanguero. "Puñalada", "Silencio", "Barro" y "Cantando Vivo".
Mis discos no son obras de arte. Son lo que son. Testimonios de mi Vida de Tango.
A muchos artistas les resulta difícil obtener los recursos que se merecen. Me considero parte de esa gran mayoría. Hago lo que puedo, bien de abajo como quijote.
También sucede que cantantes desagradables tienen más posibilidades que otros armoniosos y las explicaciones son tan variadas como cantores hay por el mundo. Porque la vida es así, maravillosa y desequilibrada, bella y perversa.
No pretendo desarrollar un análisis exhaustivo del asunto ni justificar mis fallos. Prefiero la creación para no distraerme en quejas.
Si calzo algún noble orgullo en esta vida, es que a pesar de los vaivenes laborales y emocionales nunca dejé de crear y creer que todo es posible.
Esquivando un resfriado canté "Barro", y aunque el producto no represente todo el caudal de mi arte, la voz está enlazada a la excelencia de Palermo y eso ya es un logro personal.
Espero que estas palabras obren como hechizo y mi próxima grabación sea producida en condiciones solventes. Voy madurando como artista y me considero a años luz de "Puñalada". Obviamente hoy estoy más capacitada técnica y emocionalmente para cualquier proyecto.
Como comentaba al inicio del texto, el encuentro con el maestro fué intuición y recomendación de mi ex.
Le pedí una cita. Fuí con el portátil imaginando que desearía ver o escuchar más sobre mi trabajo, sin embargo cruzadas las expresiones básicas de cortesía me invitó a cantar. Creo que escogí "De mi barrio". Me pidió el tono y largamos. Al terminar me piropeó generosamente:- ah pero vos cantás bien-. Empecé a tranquilizarme.
A punto de grabar, la tristeza de mi corazón desbaratado por los amores se manifestó con flujos nasales. Decidí regresar a Barcelona para actuar en el Pastís con el talentoso Negro Battaglia y organizar mi pobre casa abandonada. Le prometí que en un mes volvería saludable. Mucho no me creyó. Pero así lo hice y a partir de entonces somos amigos.
Bartolomé también confía en el hacer. Prefiere el movimiento, la actividad, el error a la inacción.
En el 2005 vino a Barna y presentamos el disco en el difunto "Corto Club". La llegada al Prat y su regreso a París donde continuaba gira con su trío, son otra extraordinaria experiencia de ribetes fellinescos, que narramos en los shows porteños para delicia de la platea. Aquí no será la ocasión.
Bartolomé necesita compartir su arte con la nueva generación, por esto en el 2007 grabamos "Cantando Vivo".
El maestro brinda su toque con humildad, por esto es un grande del tango.
Para concluir mi homenaje a Palermo, un recuerdo de hace algunos años.
Dentro de una conversación sobre los vericuetos del arte y el alma mientras nos manifestabamos por el cierre de los bancos en Quito, el pintor Jaime Zapata me disparó una frase sanadora: -Tú siempre canta Bibi, como los pájaros. Ellos no se preguntan por qué cantan-.
Hace muy poco agobié a mi santa madre con reflexiones existenciales, y sabiamente me aconsejó: Porque no escribes tus pensamientos hija, escribe que te hará bien.
Siento que el arte está en mi naturaleza.

Después de un ensayo en casa de Felipe Traine

La Boca - Buenos Aires - 14-02-2008
¿Recuerda maestro porqué nos reimos?