una tarde con Malena

Mas allá

Más allá de este dolor
yo tengo un hogar y un amor
cruzaré el océano una vez más
y me dormiré en tu abrazo


Más allá de esta soledad
yo tengo una esperanza y un amor
cruzaré el océano una vez más
y me dormiré en tus brazos.


Ay Madre Tierra
Si mis lágrimas
pudiesen curar el horror.
Te canto por mi gente nostalgias
de malvones en esta muerte.

Más allá de esta soledad
yo tengo una esperanza y un amor...

Bibi González

Te canto con mis ojos

Texto que escribí con motivo de mi primera muestra fotográfica


"Quién se aleja de su casa, ya ha vuelto.
Nuestra vida es la senda futura y recorrida" (Borges)


El 29 de mayo de 1995 me fuí de Argentina con Tangos y unas ganas tremendas de ver y amar.
Volé a Mendoza, crucé la cordillera (como patriota) y una vez experimentado Chile, caminé y canté por casi toda Latinoamérica.
Fueron más de cinco años de idas y venidas, con las artes como único patrimonio.
Cuando me fuí ya coleccionaba fotos antiguas, y mi pequeño tesoro se ha ido acrecentando a los largo de estos años.
(coleccionar fotografías es coleccionar el mundo-Sontag-)
En estos tiempos, me acompañó una vieja cámara kodak con la que inmortalicé veladas musicales, caminos ancestrales y situaciones surrealistas.
Grabé en cinta de cassette durante dos años varias noches de asombro, amor y dolor. Envolví las cintas y hasta el día de la fecha no las he vuelto a abrir.
En 1996 en Colombia (a punto de partir a una isla a pasar la navidad) compré un gran cuaderno de tapas duras para exorcizar las penas y alegrías. Escribí en este diario hasta el 2002, pero como dice Paul Strand, la fotografía es un registro de tu vida para quien sepa verlo, y en este andar fué mi aliado indispensable.
Amo la escritura, más la inmediatez de las historias y seres que se me presentaban en este periplo latino era tan desbordante, rico, peligroso, y cautivante, que me exigía agudizar primero el ojo y luego la voz.
Así fué como sin pensar y sólo cantando y caminando fotoregistré aproximadamente venticinco países.
Tomé conciencia de mi pasión por documentar en enero del 2000. Miles de indigenas llegaban de los suburbios a Quito para tomar el Congreso de la Nación. Allí fuí rauda con mi pequeña y obsoleta kodak a mesclarme cúal audaz reportera entre palos y gases, guiada por la única necesidad de capturar la esencia de lo que acontecía.
Recuerdo esa mañana como una revelación. De repente estaba dentro del Congreso con los indios retratando la Vida.
El recorrido siguió por Centroamérica, EEUU y ahora Europa.
Siempre volví a Buenos Aires para abrazar y ver a mis viejos, hermanas y seres amados, y siempre tuve la necesidad de fotografiar -como dice Sontag- para certificar la experiencia.
Esta exposición es una pequeña parte de la experiencia Argentina.
Gracias a todos los amigos que me han estimulado a compartir este trabajo.
Gracias a la Luz y al Camino.


-Dedico esta exposición a mis padres de quienes tanto aprendo cada día.-



Bibi González
Barcelona, junio 2007

Carta desde Quito

Queridos amigos:

Les escribo desde Quito, a 2800 metros sobre el nivel del mar.
Aquí estoy cantando tangos, aprendiendo y disfrutando la Vida
Este viaje es mi re-encuentro con la pachamama, con la naturaleza, con las cosas más simples de la existencia.
Transito estos días quiteños rodeada de amigos, compañeros de ruta, gente amable...
Por esto me empaña el alma comprobar, la ola de racismo y violencia que se instaura en Europa. Mientras en Francia exigen examen de adn para reagrupar familias extranjeras, en nuestra Barna una jóven ecuatoriana es atacada vilmente... Ante tamaña idiotez que sacude Europa, me emociona sentir en carne propia, lo bien que se sigue recibiendo en Latinoamérica a todo el mundo, lo cálidos que somos a lo desconocido y me pregunto, porque toleramos que agredan nuestra raza e integridad.
Con esta simple carta sólo deseo dejar testimonio de mi experiencia y de la hermandad latina que me colma el corazón cada vez que cruzo el océano. No pretendo imponer mi opinión, pero no me cabe duda que aquí está gran parte de la Verdad queridos amigos.
Caminando estas tierras puedes sentir plenamente que la Vida es mucho más que el confort que ostentamos en España. Me averguenzo, porque yo también caí en la trampa y ahora me cuesta regresar a mi país.
Mi amada Latinoamérica, estás tan jovén, bella, radiante, y tú espíritu siempre abierto a quién quiera descubrirte a pesar de tantas agresiones...
Hoy Vuelvo a tí a pedirte perdón, cuidarte y dormirme en tu abrazo....Gracias.

Bibi González
Quito 25-10-07

Flores de mi tierra

Texto escrito para mi segunda muestra.


Flores de mi tierra

"Ante todo, ansiaba apresar en los confines de una sola fotografía toda la esencia de alguna situación que estuviera desarrollándose delante de mis ojos" Henri Cartier-Bresson

Esta muestra es un homenaje a la mujer y a mi madre especialmente. Simple, certero y tanguero.
Cuando Laura Jorquera me propuso participar en Urban Tango, supe inmediatamente lo que quería decir.
Invocar a Malena y a María, cantar Eladia con Mercedes Simone y compartir lo que mi ojo había captado sobre algunas mujeres argentinas.
Aquí están las "Flores de mi tierra", minas fieles que trastornan mi alma con su fuerza y voluntad: las manifestantes del 8 de marzo, la señora que pide sus ahorros, la piquetera que me provoca, la feminista del paraguas, las madres de la plaza, las niñas de la calle, la mujer del chino... Y por supuesto mi vieja, los ojos puertos que todo lo pueden y todo lo perdonan.
Algunas de estas fotos integraron la expo "Te canto con mis ojos". Decidí retomar la temática barrial pero con perfume de hembra valiente.
"La fotografía es la única lengua comprendida en el mundo entero, y al acercar a todas las naciones y culturas...refleja con veracidad la vida y los acontecimientos, nos permite compartir las esperanzas y angustias de otros, e ilustra las condiciones políticas y sociales. Nos transformamos en testigos presenciales de la humanidad e inhumanidad del género humano." -Helmut Gernsheim-
Estas palabras fueron las que me llevaron a cerrar la muestra con las niñas de la calle y las niñas de la casa, ya que serán las futuras madres de nuestro pueblo.
Creo que la fotografía es un encuentro con el espíritu del retratado. Agradesco profundamente a estas guerreras la parte de su sensibilidad que se quedó para siempre conmigo.
Me han impregnado aroma de lucha, audacia y ternura.

Bibi González

15 de septiembre
Urban Tango Festival
Espai Jove de L 'Eixample
Barcelona