Carta desde Quito

Queridos amigos:

Les escribo desde Quito, a 2800 metros sobre el nivel del mar.
Aquí estoy cantando tangos, aprendiendo y disfrutando la Vida
Este viaje es mi re-encuentro con la pachamama, con la naturaleza, con las cosas más simples de la existencia.
Transito estos días quiteños rodeada de amigos, compañeros de ruta, gente amable...
Por esto me empaña el alma comprobar, la ola de racismo y violencia que se instaura en Europa. Mientras en Francia exigen examen de adn para reagrupar familias extranjeras, en nuestra Barna una jóven ecuatoriana es atacada vilmente... Ante tamaña idiotez que sacude Europa, me emociona sentir en carne propia, lo bien que se sigue recibiendo en Latinoamérica a todo el mundo, lo cálidos que somos a lo desconocido y me pregunto, porque toleramos que agredan nuestra raza e integridad.
Con esta simple carta sólo deseo dejar testimonio de mi experiencia y de la hermandad latina que me colma el corazón cada vez que cruzo el océano. No pretendo imponer mi opinión, pero no me cabe duda que aquí está gran parte de la Verdad queridos amigos.
Caminando estas tierras puedes sentir plenamente que la Vida es mucho más que el confort que ostentamos en España. Me averguenzo, porque yo también caí en la trampa y ahora me cuesta regresar a mi país.
Mi amada Latinoamérica, estás tan jovén, bella, radiante, y tú espíritu siempre abierto a quién quiera descubrirte a pesar de tantas agresiones...
Hoy Vuelvo a tí a pedirte perdón, cuidarte y dormirme en tu abrazo....Gracias.

Bibi González
Quito 25-10-07